Empieza la cuenta atrás.

Hoy, en unas horas, voy a poder ver cuáles han sido los resultados de este curso y, para mi sorpresa - bueno, y para sorpresa de los que me conozcan que saben cómo soy - no estoy realmente nerviosa. Sé que me "juego mi futuro" que quizá no entre a la universidad que quiero y que, en el peor de los casos, incluso tenga que estudiar fuera de Madrid; pero estoy tranquila y lo estoy porque estoy segura de una cosa y es de que he hecho todo lo que he podido y que, pase lo que pase, voy a conseguir entrar a la carrera que quiero. Lo que voy a decir ahora puede parecer un poco pedante en algún sentido; pero es que MEREZCO entrar a la carrera que quiero y eso es algo de lo que estoy completamente segura.

Este año no he dado el 100% de mí, he dado el 110% y me ha dejado tanto física como emocionalmente agotada, la verdad; así que, a la fuerza, tiene que haber merecido la pena. Eso sí, no quiero volver a estar así ni un año más; de hecho, ahora mismo me obligo a no estar así ni un año más. Porque no, porque no merece la pena tantísimo sacrificio y tanta amargura por algo que, con un poco más de paciencia, seguramente podía haber conseguido.
Sin embargo, aún ni siquiera me creo que esté oficialmente de vacaciones y que, finalmente, vaya a ser universitaria si todo va bien. Ee me hace raro e, incluso, creo que voy a echar un poco de menos el instituto el cual, aunque ahora me pareza increíble decirlo, tenía cierto encanto. Voy a pasar de ser Sara a ser un número y de que me den todo con más o menos facilidades a tener que buscarme la vida y presiento que va a ser duro; pero estoy preparada... o eso creo.

Además, reflexionando, me he dado cuenta de que lo he pasado fatal un año para estudiar lo que quiero, sí, pero a fin de cuentas me he esforzado al máximo con el objetivo de seguir pasándolo un poco "mal" por así decirlo. Va a haber asignaturas que voy a querer dejar y/u olvidar e incluso habrá otras de las que sólo me suene el nombre... pero, al igual que para lo anterior, estoy preparada para ello.

Por todo ello, he aquí lo que voy a tener que recordar estos cuatro, cinco, seis - ¡Nueve! - interminables años que, espero, comiencen a partir de septiembre. Si hace falta, lo recordaré todos los días antes de dejarme vencer por el "no puedo" constante que ha intentado sepultarme varias veces y al que casi he dejado ganar.

Quiero ser psicóloga el día de mañana. Y no lo quiero simplemente por capricho, sino porque quiero ser útil en esta sociedad y este es mi modo de servir de utilidad a los demás tal y como yo lo veo. Nuestros sentimientos y pensamientos manejan mucho nuestras vidas y, en muchas ocasiones, pueden hacérnoslo pasar verdaderamente mal. Otras veces el malestar no procede de nosotros, sino de los acontecimientos que se desarrollan en nuestro derredor y que no sabemos controlar y eso nos hace pensar que no valemos lo suficiente y que nunca podremos llegar a ser "iguales" a aquellos que nos critican. Por desgracia, yo no he dado con gente buena toda mi vida, de hecho, he dado con algunas personas bastante mediocres y, al igual que yo, cientos - ¡Miles! ¡Millones! Muajajajaja - de personas que, por culpa de ciertas circunstancias, no han logrado encontrar su lugar en el mundo.
Y, en definitiva, yo quiero estar ahí para ellos. Para ayudarles con sus pensamientos o sentimientos en la medida de lo posible y, además, para brindarles ciertas pautas que les permitan controlar un poco sus circustancias. Sé por experiencia que todos necesitamos a alguien que nos escuche y que nos ayude a salir adelante y yo quiero ser ese alguien para todos aquellos que lo necesiten al igual que lo he necesitado yo. Quiero ayudar a hacerle ver a la gente lo que vale y ayudarles a que se vean como las personas dueñas de sí mismas que realmente todos podemos ser al margen de todo aquello que intente hundirlos. Y, sobre todo, me encantaría ayudar especialmente a niños y adolescentes - sobre todo a estos últimos, que normalmente piensan que nadie, excepto sus amigos, se interesa por sus opiniones o sentimientos -  y sí, sé que puede sonar ridículo para muchos; pero es lo que yo llamo vocación.


22 de junio de 2011. Graznado por Sara a las 00:00

posted under |

1 calificaciones:

Isabel dijo...

Sólo diré... enhorabuena, universitaria, futura psicóloga *________*

Te quiero, baguette (LL)

Y a disfrutar del verano *O*

Publicar un comentario

Entrada más reciente Entrada antigua Inicio